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Ataviado con un chaleco guinda con el logotipo de Morena, Marcelo Ebrard se registró este mediodía de manera oficial para participar en las encuestas con las que se definirá la coordinación nacional de la defensa de la cuarta transformación.
Al hotel donde se desarrolló el registro, llegó acompañado de su esposa Rosalinda Bueso. Ya lo esperaban una veintena de diputados, senadores y ex funcionarios, mientras que en la calle había un pequeño contingente de simpatizantes.
Momentos después, entregó los documentos necesarios para su registro al presidente nacional del partido, Mario Delgado, entre ellos, la constancia de renuncia como secretario de Relaciones Exteriores que entregó el lunes al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al leer el documento de compromisos que asume para participar en el proceso, Ebrard Casaubón presumió que fue el primero de los seis aspirantes que presentó su documentación, “soy el primero que me separé del cargo y soy el primero en las encuestas”, dijo.
Luego que el presidente de Morena aclaró que el partido no puede hacer un financiamiento y son los aspirantes quienes deberán realizarlos con sus propios recursos, Ebrard se comprometió a asumir el principio de austeridad republicana, y adelantó que este jueves dará a conocer detalles de los recorridos que hará en el país, así como de los orígenes del financiamiento que requerirá para ello.
Como parte de la carta compromiso, sostuvo que promoverá los avances de la 4T, y garantizó que aceptará la resolución de la encuesta, que será inapelable. “Me comprometo formalmente a respetar y respaldar el resultado final de tal proceso, y a dar todo mi apoyo inequívoco a quien resulte como coordinador o coordinadora de la defensa de la transformación… en este caso coordinador”.
También, se pronunció por rechazar y combatir la corrupción en todas sus formas; a “evitar que simpatías y animadversiones personales pesen en sus decisiones”, así como “usar el poder público con el objetivo de servir a los demás, y nunca con propósito de beneficio o lucimiento personas, así como lo he hecho toda mi vida”, además de actuar de manera institucional y democrática.
A la vez, asumió el compromiso de “no dejarme llevar nunca por afanes de venganza”, evitar confrontaciones personales, a no agredir a otros aspirantes, y evitará acciones de desprestigio contra otros participantes.
En el que calificó como un proceso inédito de consulta a la población, ya que podrá participar cualquier persona, pidió a sus simpatizantes evitar campañas sucias o descalificación.
La propuesta que vamos a llevar en nuestro recorrido, que será muy austero, de contacto con las personas, de dialogar y escuchar al pueblo de México - sobre todo escuchar con humildad lo que el pueblo de México considera- debe ser la siguiente etapa de la cuarta transformación. Lo que va a permanecer y lo que tenemos que agregar en los próximos años. A eso vamos a todo el país.
Recalcó que "es un tiempo de mujeres y hombres, de hacer equipo, de buscar en qué nos parecemos, cómo podemos hacer que México alcance su grandeza. Unos y otros, el norte y el sur, el centro y el sur, todas y todos, pueblos originarios por la grandeza de México”.
Con un “todo va a estar bien”, que acuñó como lema, concluyó su primer mensaje ya como participante formal en el proceso.
Adelantó que el lunes iniciará sus recorridos, a primera hora, pero omitió revelar el lugar, “para no dar ventajas a los demás aspirantes, los voy a sorprender el lunes”.
Fuente: La Jornada
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